Entre este 25 al 27
de enero de 2013 se realizará en Santiago de Chile la Cumbre de los
Pueblos de América Latina, el Caribe y Europa: Por la justicia social,
la solidaridad internacional y la soberanía de los Pueblos, esto en
forma paralela a la Cumbre UE – CELAC donde estarán representados todos
los gobiernos de la Unión Europea y de aquellos países asociados a la
Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños. En ese contexto, se
realizará además la reunión del CELAC, ocasión en que el Gobierno de
Chile cederá la coordinación del bloque regional al Gobierno de Cuba.
En esta Cumbre
también participarán los niños y niñas, como lo han hecho años
anteriores, la última fue en Brasil, en junio de 1012. Recordemos su
Declaración:
Declaración
de lxs jóvenes latinoamericanos/as para el Buen Vivir. Hacia Río +20 y la
Cumbre de los Pueblos…
Los representantes de los niños, niñas y jóvenes de Argentina, Bolivia,
Brasil, Chile, Colombia, Perú, El Salvador, Nicaragua y Guatemala reunidos el
15 y 16 de junio en la Reunión Continental de Jóvenes de co-partes de terre des
hommes – Alemania, en Praia Grande, Sao Paulo – Brasil en el proceso previo a
la conferencia de Desarrollo Sostenible Rio + 20.
Reconocemos que:
Los saberes, prácticas y cosmovisiones de nuestras culturas originarias
están en peligro de desaparecer y ser subsumidas por el actual sistema mundial
mono cultural, que pretende universalizar desvalorizando todo lo proveniente de
los pueblos indígenas y tradicionales.
El sistema económico capitalista está en crisis, puesto que sus fases de
extracción, producción, consumo y descarte es incompatible con la capacidad de
regeneración de la naturaleza, es también incompatible con la vida y la
naturaleza considerando a ésta última como un objeto convirtiéndola en recursos
naturales que deben ser explotados.
Tras la realización de Conferencias, Acuerdos, Protocolos y demás
instrumentos Internacionales en torno a la problemática del cambio climático y
sus efectos, el compromiso político no ha llegado a concretizar acciones que
contrarresten estas consecuencias del actual sistema económico, lo que ha
llevado a los acuerdos al fracaso.
Así mismo los principales causantes del cambio climático se resisten a
firmar los acuerdos y comprometerse con estos, para no afectar sus intereses
económicos.
El sistema trata de reinventarse, proponiendo solamente medidas
parciales que no son suficientes para lograr el cambio que creemos necesario,
por lo tanto aún se continúa una relación insostenible entre seres humanos y
naturaleza. Además se pretende colocar un precio a los ecosistemas en crisis
para continuar ese proceso de explotación irracional.
“El sistema económico capitalista está en crisis, puesto que sus fases
de extracción, producción, consumo y descarte es incompatible con la capacidad
de regeneración de la naturaleza…”
En nombre del desarrollo económico muchos gobiernos han impuesto
políticas que responden a los intereses de las transnacionales, corporaciones y
empresas entre otros grandes grupos económicos a través de la militarización,
privatización de la Madre Tierra, desplazamientos humanos forzados, entre otras
acciones violentas que violan los derechos de los pueblos. Este sometimiento
termina afectando directamente su soberanía.
En nuestros Estados el modelo de desarrollo capitalista sólo ha servido
para beneficiar económicamente a una pequeña parte de la población, sosteniendo
grandes alteraciones ambientales que afectan a todas las formas de vida. Estos
efectos son especialmente perjudiciales para los sectores de la población que
cuentan con menos recursos para hacer frente a estas problemáticas, siendo la
mayoría.
“…se pretende colocar un precio a los ecosistemas en crisis para
continuar ese proceso de explotación irracional…”
Nuestros sistemas educativos no generan concientización socio político y
cultural, fomentan el desequilibrio entre los seres vivos de la naturaleza y
desvalorizan las habilidades personales. Además evidenciamos una fragilidad en
los elementos metodológicos didácticos.
El sistema ha cimentado, en las instituciones de la sociedad: el
individualismo competitivo entre seres humanos debilitando el sentido de
comunidad, familia y la valorización del género femenino; el consumismo que va
más allá de las necesidades de las personas; y el antropocentrismo que fomenta
una relación de poder para dominar y destruir nuestro entorno .
Frente a estas principales problemáticas que nos afectan a todos los
seres vivos, especialmente a niños, niñas y jóvenes, asumimos un rol activo
como agentes de cambio necesario para nuestros pueblos, nos posicionamos,
demandamos y proponemos lo siguiente:
Frente al sistema en crisis, debemos garantizar la recuperación,
fortalecimiento y transmisión de los conocimientos, buenas prácticas, valores y
cosmovisión de las culturas ancestrales, ya que éstas no se han perdido
totalmente. Esta opción nos aporta herramientas para la soberanía de los
pueblos construyendo un Buen Vivir.
“…es necesaria una democratización de los medios de comunicación para
que en ellos exista una diversidad de opiniones, y las culturas sean
representadas.”
Frente a la amenaza hacia la biodiversidad, nuestra opción es el camino
del Buen Vivir.
Esta forma de vida contempla a la Madre Tierra como una entidad que
provee, pero que también tiene su propia espiritualidad. Le decimos no al
consumo desenfrenado, no a la contaminación de nuestra Madre Tierra, y no a una
explotación irracional de los recursos.
Nosotros defendemos que la sociedad civil debe asumir una posición
activa sobre los temas políticos que afectan nuestras vidas. De esta forma,
nosotros como niños, niñas y jóvenes debemos organizarnos para ser escuchados,
participar en espacios de toma de decisión y ser tomados en cuenta en la
generación de políticas públicas como actores sociales.
“…asumimos un rol activo como agentes de cambio necesario para nuestros
pueblos…”
Para generar un cambio no es suficiente una economía verde. Esta
propuesta solo afecta algunos elementos de nuestra sociedad. Nuestra propuesta
es que los cambios deben ser en las bases del modelo económico que estamos
practicando.
Rechazamos toda forma de violencia, especialmente las que sufren
nuestros pueblos para entregar las tierras, el agua y la energía a manos de
privados para su explotación.
Aún más cuando esa violencia es a través de la
militarización de las zonas en disputa.
En nombre del desarrollo económico han ocurrido muchos casos
de vulneración de los Derechos Humanos y de la Madre Tierra, tales como
desplazamientos forzados, uso de la fuerza militar para resolver conflictos en
nuestras comunidades, y también la explotación de la Madre Tierra por intereses
económicos. En base a lo que fue dicho, proponemos procesos de concientización
de las comunidades y organización a partir de sus propios contextos culturales.
A partir de lo anterior, proponemos que el sistema de
educación integre en su currículum elementos para la formación de la población
que fomenten la concientización sociopolítica, cultural para promover un
equilibrio entre los seres vivos de la naturaleza. Además de eso, también
defendemos la existencia de espacios donde se desarrollen procesos educativos
fuera del sistema escolar. Estos espacios deben fomentar el desarrollo integral
de la persona, construyendo los conocimientos útiles para sus comunidades. Así,
queremos una sociedad que respete los derechos personales, sociales y de la
Madre Tierra.
Creemos que es necesaria una democratización de los medios
de comunicación para que en ellos exista una diversidad de opiniones, y las
culturas sean representadas. Así, sumado a lo anterior, también es necesario
que el Estado se preocupe de la inclusión de espacios culturales en los medios
existentes, para que de esta forma las personas que se relacionen con estos
medios puedan tener herramientas que contribuyan a su análisis crítico. De la
misma manera, queremos que existan las condiciones para que los medios de
comunicación pertenecientes a las comunidades locales puedan coexistir con los otros
medios masivos.
Exigimos a los gobiernos del mundo asumir acciones
inmediatas para restaurar una relación armoniosa con la naturaleza, a través
del respeto a la diversidad cultural, identidad y soberanía de los pueblos,
garantizando mecanismo reales de participación de la sociedad civil.
“…nosotros como niños, niñas y jóvenes debemos
organizarnos para ser escuchados, participar en espacios de toma de decisión y
ser tomados en cuenta en la generación de políticas públicas como actores
sociales.”
Los niños, niñas y jóvenes hacemos un llamado a los
gobiernos, movimientos sociales y organizaciones para unirnos y emprender
acciones conjuntas de participación, movilización e incidencia para alcanzar un
Buen Vivir.
Agradecemos a la Madre Tierra por la oportunidad de
permitirnos hacer este trabajo como hijos llenos de amor, luchemos por la vida!
Praia Grande – SP. Brasil, 17 de Junio de 2012.